Recuerdo tu ausencia
deslizarse suavemente
a través de mi oreja
sangrante de rojo Olvido.
Y la premura con que
aborrezco esta presencia
sangrante revive tu
muerte hasta sacudirme
una vez más,
que no estás,
aunque te nombre
el Olvido.
lunes, octubre 09, 2006
Suscribirse a:
Entradas (Atom)